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Gigotea Elegante Tortuga de Agua Dulce |
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Alimentación y Reproducción de Tortugas de RíoLa tortuga siempre pedirá comida.
Tienen un apetito voraz. Para alimentarla, disponga de un depósito
de al menos 40 de diámetro por 20 centímetros de profundidad
lleno de agua fresca. Manténgala durante media hora mientras come
y evacua. Estos reptiles acuáticos son esencialmente carnívoros
e ingieren de vez en cuando algunos vegetales. Su boca no tiene dientes pero
posee filos en la mandíbula.
Su comida ideal es el insecto vivo y el pez. Cuando no se dispone de ellos, aliméntelas con carne de res cocida, de manera que el interior este casi crudo. Acerque un trocito y la tortuga (que tenga buenos modales), tomará el alimento sin llegar a apretar sus dedos. Como carece de dentadura este animal traga su alimento tal como lo recibe. Por esta razón los trozos que se le suministran deben ser pequeños. Acaricie su cabeza y extremidades. La gigotea comerá también el grano de maíz cocido, cubitos de zanahoria, manzana, lechuga. Pruebe para determinar que es lo que más le gusta. Se alimentan también de productos envasados como camarones disecados y pellets de comida para tortuga acuática de agua dulce, que incorpora en ella vitaminas y minerales necesarios para una buena salud. No le de sólo un tipo de alimento. Puede suministrarles animales vivos como grillos, gusanos de tierra, caracoles acuáticos y peces pequeños, Una vez al mes, no las alimente durante una semana o dos, de manera que acepten comer frutas y vegetales. Se pueden alimentar cada 2 días, como también todos los días, pero en menos cantidad. Si no come en por varios días, entonces aceptará las verduras y la fruta. Prefieren la carne. Los alimentos en pellets deben tener menos de 35% de proteína. Los mejores traen calcio y vitaminas. La gigotea es carnívora. Prefiere los insectos a los vegetales. Los vegetales que coman deben tener buena concentración de vitaminas. Algunas tortugas aceptan comer también lechuga, tomate, choclo, papayas, plátano, etc. Si su tortuga rechaza comer vegetales, debe darle un suplemento de minerales y vitaminas. Si la tortuga no desea alimentarse, no se preocupe. Estas tortugas son especialmente selectivas con su alimento. Es probable que deseen algo diferente. Si ya definitivamente no quieren alimentarse, esto puede indicar un problema de salud. La Gigotea no come mientras toma sol o previo y durante el tiempo que hiberna! Dele un poco de su tiempo todos los días. Acaricie su cabeza y extremidades. Reproducción y CrecimientoLa Gigotea se reproduce
por huevos y, nace capacitada para nadar. Su tamaños es similar al de una moneda. Sin embargo es necesario
mantener un lugar donde las pequeñas salgan del agua a descansar puesto
que aun deben acostumbrar su ritmo de respiración. Pueden
llegar a morir ahogadas.
La Gigotea puede tener descendencia a partir de los 5 años de vida, edad aproximada en que la hembra, después de hibernar, anida una vez al año sus huevos. Su caparazón ha alcanzado los 15 cm. de largo. El cortejo del macho es muy curioso en esta especie. El macho nada hacia la hembra y comienza a acariciarla en la cara con las aletas delanteras. También nada en círculos alrededor de ella y a veces golpea su caparazón con sus uñas delanteras las que parecen vibrar. Si la hembra está receptiva aceptará al macho. Después de 45 minutos retire a la hembra del depósito de agua e intente nuevamente después de 2 días. El acoplamiento dura alrededor de 15 minutos. Para concretar el acople se debe habilitar un depósito de agua de alrededor de 50 litros para una profundidad de agua de 25 cm. El agua debe estar temperada, (26 grados centígrados). Se recomienda que durante la preñez la hembra sea separada del macho, de manera que no la moleste. Trate de manipularla lo menos posible, sólo cuando sea absolutamente necesario. Mantenga su agua muy limpia y a la temperatura adecuada, (22 a 28 grados centígrados). La hembra cambiará su apetito. Rehusará comer, cosa que es normal en esta época. Aun así siga ofreciéndole comida. Prepare un receptáculo de 40 cm. x 40 cm., y ponga en su interior tierra con arena húmeda. La tierra debe tener unos 10 cm. de espesor. La humedad debe mantenerse constante. El período de gestación es de 2 meses, pero si aún después de ese tiempo la hembra no ha encontrado un lugar apropiado para depositarlos, los mantiene dentro de su cuerpo. Durante las dos últimas semanas podrá notar que ella se mantiene más fuera del agua que dentro y se desplaza resoplando y excavando. En este punto es necesario ponerla en el receptáculo ya indicado. Trate de observar dónde deposita los huevos. Puede poner de 2 a 20 huevos. Es preferible dejar los huevos tal como los deja la hembra. La manipulación los puede dañar. Sin embargo, cuando están bajo tierra es difícil saber en el estado en que se encuentran. A veces ocurre que uno de los huevos se hecha a perder por efecto de los hongos y esto se puede traspasar a los demás. También es posible, que al estar enterrados las crías tengan dificultad para salir.
Si usted decide retirar
los huevos e incubarlos por su propia cuenta, debe disponer de una caja
de incubación. La mejor opción es utilizar una hielera portátil
(de camping). Perfore la tapa con varios orificios pequeños, (unos
10 orificios de ¾ cm. de diámetro). También un orifico
especial para albergar un porta ampolleta de 10 a 15 watts que tempera
el interior. Deposité una cama de unos 10 cm. de profundidad de
arena o turba con tierra. Esta mezcla debe mantenerse húmeda en
forma constante.
Para retirar los huevos del lugar de donde los puso la hembra es necesario ser cuidadoso. Marque primeramente los huevos en su parte superior con líquido corrector o lápiz de tinta, de manera que en la caja de incubación usted los oriente siempre de la misma forma. Al excavar para retirarlos trate de palparlos con sus dedos y tómelos con confianza. No son quebradizos, sino que son suficientemente flexibles para soportar la manipulación. Lávelos uno por uno con agua fresca y deposítelos en la caja de incubación. Observe los huevos después de unos días, pero no los mueva de su lugar. Verifique si existe alguno en mal estado. Si nota una coloración extraña pueden estar infectados con hongos. Retírelos de inmediato para aplicarles una solución de mitad agua y mitad enjuague bucal. Aplique el líquido con un pincel. En caso de que algún huevo se vea muy deteriorado es preferible descartarlo. Al completar los 80 a 85 días se acerca el día de la eclosión. Las crías rompen la cáscara del huevo con su "diente de huevo" que después de una hora de nacer se les cae y nunca más vuelve a salir. Deje que las crías salgan por su propia cuenta del huevo, proceso que puede demorar hasta un día más. Al salir usted notará un pequeño saco que cuelga de su ombligo. Este es el saco de la yema que los alimentó mientras incubaban. No intente retirar este saquito puesto que la cría puede morir. Se desprenderá solo y dejará una herida en el plastrón que sanará por si sola. No intente ningún tratamiento. Ubique a las crías en un estanque a razón de 30 litros por cada docena de tortugas. Es necesario darles un lugar seco y otro de agua poco profunda. Los recién nacidos necesitan aprender a flotar y a estar sumergidos por períodos largos de tiempo. Comience a alimentarlos con trocitos muy pequeños de comida. No olvide que necesitan ser iluminados con luz de amplio espectro. Lo ideal es el sol pero en el mercado también existen lámparas apropiadas para causar el mismo beneficio en las tortugas. Deben ser del tipo Metal Halógenas. No la ampolleta común que venden para plantas de interiores. La luz ayuda a endurecer la caparazón de las crías. Mantenga el agua muy limpia y cámbiela cada tres días. Ayudará que las tortugas tengan sus ojos sin infección.
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